¿Pero se perdona todo todo?

En mayo tenemos las primeras comuniones de la parroquia y ya nos estamos preparando para la primera confesión. Mis niños ya saben que es el pecado, toda ofensa voluntaria a Dios, y también saben que hay pecados veniales y pecados mortales. Pero lo que no sabían es que Dios Padre lo perdona Todo.¿Todo de todo? Si todo de todo,les respondí y entonces sus ojos se agrandaron como platos, con esa cara de sorpresa que tanto me gusta, pues en los ojos les brilla esa luz del que se da cuenta de lo que eso signficaba, esa chispa de la Gracia. No importaba que se hiciera la mayor barbaridad del mundo, Jesús siempre nos está esperando en la confesión y siempre nos perdona. Y para ponerles un ejemplo les conté la historia del buen y del mal ladrón que estaban junto a Jesús en la cruz. El buen ladrón, que antes había sido malo, había robado y matado pero en el último ejercicio de su profesión se había robado el cielo al pedir perdón a Jesús. Ahí en la cruz, en el último momento, aquel ladrón en vez de recibir el castigo por sus pecados, se ganó el cielo y todo por pedir perdón. Gracias al buen ladrón estamos seguros de que existe un paraiso y también de que el único requisito es que estemos a bien con Jesús cuando muramos. Es curioso pero mis niños siempre habían pensado que el buen ladrón estaba en la cruz por bueno, como Jesús, pero no que antes había sido malo y luego bueno. Tal vez por eso comprendieron mucho mejor lo que significaba que Dios ama tanto que hasta en el último momento de su vida El quiere que el hombre se salve, y si se arrepiente le abre las puertas del cielo, como al buen ladrón.